Tú puedes hacerte tranquilamente una etapa de 30 km y en el kilómetro 28 estar perfectamente de fuerza, que a partir de ahí hasta el final de etapa, se te acabará toda la energía, ya sean los kilómetros más llanos de todo el día. Es el factor "Último Kilómetro".
Sientes tan cerca el albergue para dejar la mochila y pegarte una ducha, que los kilómetros que te quedan tendrás la sensación que se multiplican por cinco y que nunca llega el final. Es inevitable.
Hoy era una etapa larga, 27 kilómetros, con las subidas y bajadas a las que ya me empiezo a habituar, que no acostumbrar, también la primera en la que voy solo, así que pensé que se iba hacer larga, pero el tiempo acompañó y el otro gran compañero del Camino, el barro, también decidió retirarse un rato. También ayudó tener una liebre para ir a rebufo en los seis primeros kilómetros de cuesta a la salida de Tineo, en menos de una hora los tenía ventilados. Gracias Juan, espero volver a Tineo para ir a comer en tu restaurante y tomo nota de tus consejos para pedir patrocinio para ese proyecto de Camino.
El resto de la etapa fue como estar metido en un anuncio de central lechera asturiana.
Y mañana prueba de fuego, subida al puerto de Palo 1150 metros. A ver que pasa.
Juego para peregrinos: Descubre esta frase en el criptograma: "Quien va a Santiago y no al Salvador visita al siervo pero no al señor". Esta placa está colocada en la subida a la salida de Tineo
Las fotos son realmente bonitas!
ResponderEliminarGracias, lo que mola son los lugares, a ver si algún día te puedes venir a hacerlos
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